Así vive Javíer "Palito" Macías, entre la labor de comerciante, su familia, y una innumerable cantidad de medallas ganadas a nivel país y mundialmente.
Javier Macías, que vistió la remera de la Selección Argentina junto a otros 54 corredores, participó en el Panamericano de Colombia, donde logró la medalla de plata tras finalizar por detrás del local John Jairo Botero. A pesar de un desgarro, una caída y un circuito afectado por el clima, se subió, una vez más, al podio.

La continuidad en el calendario marca el Desafío del Valle en Río Pinto, dependiendo de la lesión, en tres semanas, la segunda fecha del NOA en Santa María, Catamarca, y la Copa Across en Córdoba. Además está la ilusión de encontrar un soporte económico con sponsors para el Mundial de Andorra en Julio, y formar parte del Transmontaña en Agosto.

Un día en su vida

"Palito" Macías cuenta que desde 2011 se levanta temprano por las mañanas a entrenarse, para desde las 9 abrir su comercio ligado al ciclismo en el barrio Tres Cerritos, luego de dejar a sus hijos en el colegio. Allí es el encargado del asesoramiento, de las ventas, inclusive de las compras, y hasta brindando servicios técnicos para las bicicletas.

"Después de las mañanas agitadas, vuelvo a almorzar y me voy a pedalear un poco más, para por la tarde volver al ámbito laboral hasta las 21, y allí a descansar", aportó Macías, quien guarda un gran respeto por su esposa a la que considera que: "es fundamental por cómo me banca y ayuda, tanto en mi carrera como en el negocio".

"Hoy no tengo la posibilidad de vivir del ciclismo y por eso tengo que tener otro trabajo para poder cubrir los gastos", arrojó Javier, que entre risas, además, contó que los fines de semana la familia se transforma en el soporte para sus entrenamientos el inclusive respetan que llegue un poco más tarde hasta a los eventos de los seres más cercanos.

El dato

Son distintas pero de alguna manera van de la mano, la referencia es para el ciclismo y el motociclismo. Lo que no se sabía, es que Macías volcó su experiencia en los representantes salteños del Dakar, Kevin y Luciano Benavides. En sus preparaciones para las competencias, fue "Palito" el que los "entrenó" desde su lugar para adoptar conceptos.